martes, 27 de septiembre de 2011

LOS CLAVOS

Érase una vez un chico con mal carácter. Su padre le dió un saco de clavos y le dijo que clavara uno en la verja del jardín cada vez que perdiera la paciencia o se enfadara con alguien.
El primer día clavó 37 clavos. Durante las semanas siguientes se concentró en controlarse y día a día disminuyó la cantidad de clavos nuevos en la verja. Había descubierto que era más fácil controlarse que clavar clavos.
Finalmente llegó un día en el que ya no clavaba ningún nuevo clavo. Entonces fué a ver a su padre para explicárselo.
Su padre le dijo que era el momento de quitar un clavo por cada día que no perdiera la paciencia.  Los días pasaron y finalmente el chico pudo decir a su padre que había quitado todos los clavos de la verja.
El padre condujo a su hijo hasta la verja y le dijo: « Hijo mío, te has comportado muy bien, pero mira todos los agujeros que han quedado en la verja ».
Ya nunca será como antes.  Cuando discutes con alguien y le dices cualquier cosa ofensiva le dejas una herida como ésta.
Puedes clavar una navaja a un hombre y después retirarla, pero siempre quedará la herida.  No importan las veces que le pidas perdón, la herida permanecerá. Una herida provocada con la palabra hace tanto daño como una herida física. Los amigos son joyas raras de encontrar.
Estan listos para escucharte cuando tienes necesidad, te sostienen y te abren su corazón. Enseña a tus amigos cómo les quieres.

martes, 20 de septiembre de 2011

ENAMORATE COMO LAS AGUILAS

El águila macho, divisa a la hembra que le atrae a lo lejos, se acerca a ella y trata de hacerse notar, pero al parecer no le interesa, él empieza a volar junto a ella, de pronto la hembra emprende su vuelo a gran velocidad hacia arriba, el macho la sigue a la misma velocidad, luego ella desciende y toma en su pico una rama, nuevamente se eleva y en medio de su vuelo, deja caer la rama, el macho al darse cuenta de esto se apresura a atraparla en el aire y se la entrega, pero ella ya no la quiere, continúa su vuelo, él permanece a su lado, luego de un tiempo considerable de haber permanecido en esta situación, ella le ofrece su pata, él la une a la suya y desde ese momento establecen el compromiso formal y eterno, ya que ellos jamás se unen a nadie mas, aún si la hembra muere dejando crías el macho las cuida solo. Este es el proceso de enamoramiento y unión de las águilas, mismo que no es muy diferente al humano ya que hemos sido creados como seres afectivos que necesitamos de amor y compañía, por esta razón en un momento determinado nos unimos a esa persona con la cual deseamos compartir nuestra vida, pero lamentablemente la manera de llegar a esta etapa de nuestra vida ha perdido la riqueza del proceso que Dios quiere regalarnos. En la actualidad el proceso de amistad y enamoramiento ya casi no existe, es común conocerse por una horas, si te simpatizó y se dieron un beso ya estás amarrado (es la expresión en mi país); siguen saliendo si se sienten bien, pero si no es así, aquí no ha pasado nada, en el mejor de los casos continúan por algún tiempo, de pronto… como ahora es “normal” el comprobar si eres compatible sexualmente con tu pareja y si están de acuerdo inician su vida sexual. Esto es frecuente en el mundo, pero veamos en el cristiano. El varón ve a la chica, le sonríe, si ella responde vuelve a sonreír, si él conserva el interés espera la próxima oportunidad para entablar conversación (es que como hay muchas chicas y soy “líder”), la mujer en cambio si le interesa el joven también sonríe esperando en su corazón que se acerque, pero como no lo hace espera la próxima ocasión para ella acercarse (es que como hay tantas chicas, si no lo hago “tal vez se va mi oportunidad”), se hacen amigos, salen un tiempo y de pronto ya son pareja, comienzan a orar para que Dios bendiga la relación y les fortalezca, se sienten tan cerca de Dios y tan fuertes que comienzan a dar lugar a sus deseos corporales pensando que pueden detenerse cuando quieran; pero, sin darse cuenta no pudieron y cayeron. Como vemos no es muy diferente el resultado ya que somos seres humanos, no es incorrecto el sentir deseo de estar con tu pareja, lo más hermoso es amar y ser amado pues fue creado por Dios, pero debemos utilizarlo con responsabilidad y sabiduría, responsabilidad en el sentido de respeto, consideración y valor que debes a tu pareja y sabiduría para cuidar la relación, saber que no puedes sobrestimar tus fuerzas; aprender a ser cauto para no exponerte a situaciones comprometedoras, identificar el peligro y aprender a huir. No es fácil realizar lo que te estoy diciendo pues aunque anheles con todo tu corazón hacer lo correcto, somos simplemente mortales, pero hay alguien dentro de ti que síi puede, es Jesús, acude a él, te dará la fuerza que necesitas para creerle y esperar. Tienes mucho tiempo por delante, disfruta de lo hermoso de una relación; mira a las águilas; creo que ellas han comprendido mejor el proceso que Dios desea que tengamos. Mujer, mira como el águila espera a que él busque el momento de acercarse, y prueba si realmente quiere permanecer a su lado; no temas perder a alguien que aún no tienes, si él es el adecuado para ti no te dejará escapar, tú varón, observa la actitud del águila, emprendedor, luchador, protector y constante para conseguir su felicidad.

lunes, 12 de septiembre de 2011

EL EFECTO DE UN ABRAZO

Un amigo me envió fotografías de dos bebés mellizas prematuras. Las enfermeras pensaban que no sobrevivirían. La más grande de las bebés parecía tener más probabilidades, pero la otra no. Así que cuando creyeron que la más pequeña moriría, una de las enfermeras la puso junto a su hermana en la incubadora. Casi al instante, la más grande la rodeó con su bracito y se acurrucó junto a ella toda la noche, abrazándola con fuerza. A pesar de las sondas en los brazos y en la nariz de ambas, estaban juntas. Y eso bastó. Las enfermeras notaron que desde ese momento la más pequeña comenzó a mejorar. Al día siguiente, se sorprendieron al ver cuán bien reaccionaba. Y a partir de allí, creció y aumentó de peso. Las dos mejoraron. Un abrazo y la cercanía mutua logró la transformación.
El Dr. Lester Breslow, decano de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de California, en Los Angeles, llevó a cabo un estudio en el que participaron 7.000 personas durante nueve años. Al comienzo del estudio, les preguntó cuántos amigos íntimos tenían. Al fin de los nueve años, comparó los que habían muerto con el número de amigos de cada uno. A cualquier edad, los grupos que tenían menos amigos tuvieron tres veces más muertes que los demás.

CINCO NIVELES DE RELACIONES

Las relaciones existen en cinco niveles. En el primer escalón está el nivel de extraño. Son las personas con las que nos cruzamos, saludamos, pero no conocemos. El siguiente nivel es el de conocido: gente con la que hablamos y le decimos la hora o le hablamos del clima. El tercero es el nivel de amistad casual. Es gente que trabaja en el mismo lugar que nosotros o está en la misma clase. Con ellos, intercambiamos opiniones de vez en cuando o alguna que otra idea. En el cuarto nivel está el grupo más estrecho de 10 a 15 personas a las que podemos revelar algunos de nuestros sentimientos y emociones. En el último, se encuentran los pocos amigos íntimos que nos conocen bien. Son los amigos leales que permanecen a nuestro lado en tiempos buenos y malos. Este nivel de relación se caracteriza por una apertura completa, un sentido de aceptación y afirmación, y por una lealtad mutua.

QUÉ HIZO JESÚS

Los hallazgos de la ciencia para la cura del estrés y la manera de tener una vida gozosa ya han sido reveladas por la Biblia. ¿Qué hizo Jesús? Jesús tenía un gran círculo de conocidos. Primero estaban los 12. Luego, los 70. Y dondequiera iba, siempre había una multitud. Todos sentían que estar cerca de él y los unos con otros eran fuentes de bendiciones. Pedro, Santiago, Juan, Lázaro, María y Marta, y muchos otros. Jesús influyó en sus vidas y mientras aprendían y practicaban el arte de la amistad y la unión, su felicidad y éxito aumentaban. Cuatro días después de la muerte de Lázaro, María y Marta se aliviaron de su estrés por el solo hecho de saber que Jesús había llegado finalmente a Betania.
¿Por qué Pedro tuvo tanto éxito en el Pentecostés? Alguien tan temeroso y estresado, que llegó a negar al Señor, logró cambiar y fue un testigo poderoso. Sí, Pedro tuvo éxito por el Espíritu Santo, pero antes de recibirlo, estuvo con sus amigos en el aposento alto. El vínculo que los unía les dio valor necesario para enfrentar cualquier desafío futuro. Además, Jesús mismo había perdonado a Pedro y le había dado la seguridad de su amistad.
Los estudios muestran que no es el número de conocidos lo que hace la diferencia. Los beneficios se sienten como resultado del grado de intimidad y la calidad de la relación. Tu vida va a cambiar si tienes cuatro o cinco amigos con quienes compartir tus sentimientos y de quienes recibir los abrazos necesarios. Si al menos tienes uno de esos amigos, considérate afortunado, rico en el factor amigo.
Atesora y cultiva amistades íntimas y desinteresadas en todos los lugares y en todas las ocasiones que puedas. Si te mudas, haz nuevos amigos, pero no olvides a los viejos amigos. Llámalos o escríbeles, y lo apreciarán y te responderán de manera recíproca. Ellos nos traen gozo y felicidad; además, disminuyen nuestro estrés. Como dijo cierta vez William Temple: "Un amigo verdadero es la medicina más grande".
Pero el amigo más grande de todos es Aquel que una vez dijo: "No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí"; "Venid a mí, todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar" (Juan 14:1; Mateo 11:28). Más allá de tu edad, tu ocupación, tu sexo, y tu problema, puedes sentir gozo y liberarte del estrés, si JESÚS es tu amigo. Y ninguno que tiene un amigo como Jesús puede estar trabajado o cargado.

lunes, 5 de septiembre de 2011

¿CUÁN LEJOS PUEDO IR SIN LLEGAR A PECAR?

Los jóvenes cristianos siempre quieren saber qué está bien y qué está mal hacer antes del matrimonio. La pregunta no formulada en palabras es: “¿Cuán lejos puedo ir sin llegar a pecar?” Hay muchas zonas grises para las que la Biblia no provee una orientación claramente delimitada. Sin embargo, he descubierto un trabajo de investigación acerca de los pasos que unen a la pareja, que aporta excelentes bases para tomar decisiones.

La unión de la pareja tiene componentes tanto físicos como emocionales, espirituales e intelectuales.


Cuatro fases, doce pasos

Se ha observado que los 12 pasos que vamos a detallar se dan de modo consistente en el 80 % de las 500 culturas estudiadas.

 Primera fase: No hay contacto físico

Paso 1: Del ojo al cuerpo. La primera mirada no es una mirada sexual. Es una mirada de descubrimiento. Esta primera mirada determina si la relación va a proseguir o no.

Paso 2: Las miradas se encuentran. Cuando las miradas se encuentran, hay una aceleración del ritmo cardiaco acompañado de un rubor de turbación, que provoca la interrupción y el desvío de la mirada.

Paso 3: Se entabla la conversación. Al principio, la conversación de la pareja se limita a lo más elemental: Este paso no puede ni debe ser pasado por alto. La relación necesita ser frenada y prolongada en este momento antes de que empiecen los contactos románticos. Porque en cuanto se inicia el afecto romántico, la pareja va a actuar de modo diferente.

 Segunda fase: Primeros contactos físicos

Durante la segunda fase de las relaciones, la pareja pasa mucho tiempo hablando pero el contacto ya no es sólo visual. Empieza el contacto físico, aunque no está todavía relacionado con el sexo. Los abrazos prolongados o los besos en la boca aceleran el proceso normal y suscitan respuestas sexuales antes de tiempo.

Paso 4: Mano en mano. Los primeros contactos físicos pueden ser inocentes: un apretón de manos, un toque mientras se ayuda a la joven a entrar por una puerta. Este contacto es también una declaración social: “Tengo a alguien que disfruta estar conmigo”.

Paso 5: Brazo sobre los hombros. Pronto la emoción de tomarse las manos disminuye, y se necesita algo nuevo para expresar el creciente interés. Es un gesto posesivo que significa: “Esta relación sigue adelante”. Al contacto visual y a la conversación se une ahora un mayor contacto corporal.

Paso 6: Brazo por la cintura. Pero, eventualmente, la excitación de tomarse de la mano y de pasar el brazo por los hombros también disminuye. Así es que para recuperar la excitación, la pareja pasa a abrazarse por la cintura, expresando mayor grado de posesión del cuerpo.
 
Tercera fase: Contacto íntimo

En esta fase la pareja prefiere darse la cara. Aunque no exista contacto sexual directo, el cambio de posición corporal pone al sexo en una agenda tácita de la que ambos son intensamente conscientes. La comunicación es ahora diferente. Hasta ahora la pareja ha estado desarrollando su capacidad de comunicación. Ahora los intercambios verbales se suspenden y los contactos visuales y las expresiones no verbales prevalecen.

Paso 7: Frente a frente. Cuando la pareja se sitúa cara a cara, está cruzando una importante barrera. Cada uno debe decidir cuidadosamente si detenerse en este paso o seguir adelante. En este momento se producen tres tipos de contacto: abrazos, besos profundos y prolongados contactos visuales. A partir de ahora, la pareja no casada debe tener cuidado en sus expresiones de afecto físico cuando todos los motores del sexo se ponen en marcha.

Paso 8: Manos a la cabeza. Aquí la mano de uno se detiene a acariciar la cabeza del otro mientras hablan o se besan. Este gesto íntimo está reservado para aquellos que han desarrollado un alto nivel de confianza. En otras palabras, la pareja debería dejar de verse a menos que tengan planes de contraer matrimonio en un futuro inmediato.

Paso 9: Manos al cuerpo. Ahora las manos del uno exploran el cuerpo del otro. Para el hombre acariciar el pecho se vuelve algo importante. En los pasos anteriores al 9, las manos se mantienen por fuera de la ropa. Después las manos se van a introducir por debajo de la ropa, pero permaneciendo por encima de la cintura. El paso 9 es peligrosamente progresivo, incluyendo masajes en la espalda y otras caricias. Cada vez que los novios entran en el paso n° 9 tienen mayores dificultades para detenerse en él. Por lo general es entonces cuando la mujer se da cuenta de que, o da el alto o será demasiado tarde. Este es el último punto con retorno antes de que se necesite la protección del matrimonio.

Cuarta fase: Una carne

Al último grado de intimidad se llega de un modo apropiado dentro de las relaciones del matrimonio.

Paso 10: Boca al pecho. El paso 10 conlleva el desnudar el pecho de la mujer, requiriendo por consiguiente la máxima privacidad. La pareja no busca sólo el placer y la excitación sino que está intentando culminar el acto sexual.

Paso 11: Manos a los genitales. Las manos descienden por debajo de la cintura. La excitación sexual y el juego erótico ya están lanzados en esta última y más íntima fase de caricias genitales. El diccionario define como virgen a la “persona que permanece en estado de castidad”. Esta definición muestra que la pureza ya se ha perdido cuando una pareja no casada alcanza el paso 11. Palpar los genitales de alguien difícilmente podría considerarse como algo casto, puro o virtuoso en ninguna cultura. Técnicamente esto se sitúa a apenas unos instantes antes del acto sexual.

Paso 12: Genitales a genitales. El proceso de unión alcanza aquí su más alto nivel de deseo sexual y se completa con la penetración y el coito. La unión de una pareja se ha consumado a medida que avanzaba con esos 12 pasos. Pero su objetivo tendría que estar más allá del placer sexual. El objetivo de este proceso de unión es desarrollar un vínculo indestructible de entrega y confianza entre marido y mujer. Cuando se alcanza este paso en el noviazgo puede conllevar a la perdida de la comunión con Dios. No hay deseos de orar o ir a la iglesia se pierde todo…


Resultados de acelerar o saltear pasos

Si el proceso de unión de 12 pasos se acelera, pueden producirse varios daños.

    1. Cuando algunos pasos se saltean o se aceleran, el lazo de unión se debilita y tiende a romperse o a deformarse. Esto ocurre porque los componentes de la pareja no tomaron tiempo para hablar a fondo sobre asuntos importantes —valores, objetivos y creencias— antes de encontrarse físicamente comprometidos. Una vez que los motores del sexo se ponen en marcha, las personas olvidan otros aspectos del proceso formativo de la relación. Es más fácil y más rápido conocerse en lo físico que en lo emocional, social o espiritual.
    2. Después de que una pareja se separa, tendrá tendencia a acelerar los pasos en la relación siguiente. Cada nivel de excitación sexual es tan inmediatamente gratificante que resulta casi imposible quedar satisfecho con los niveles más bajos. La consecuencia a largo plazo de una libertad sexual sin inhibiciones será la dificultad en contentarse con una sola pareja después de múltiples relaciones.
    3. Una persona sexualmente experimentada tenderá a empujar a su nueva pareja hacia el acto sexual. Una persona que se ha acostumbrado a recorrer los 12 pasos de excitación sexual sin detenerse encontrará muy difícil frenar el proceso o detenerse en los pasos 7, 8 ó 9.

Ahora que conoces en detalle los 12 pasos que unen a la pareja, podrás decidir mejor qué es lo apropiado para cada fase del noviazgo. Tus valores consagrados a Dios junto con el respeto que tienes de ti mismo dictarán tus decisiones. Los pasos 9 al 12 están fuera de lugar en una relación antes de la ceremonia de boda.

UNA INVITACIÓN A LA PUREZA SEXUAL

 El plan de Dios para nuestra vida es perfecto y no ha cambiado nunca. La intimidad sexual para los casados es el designio especial de Dios para la procreación y para nuestra satisfacción. Este es el único estilo de vida que ofrece felicidad completa. A los ojos del mundo, la decisión de mantener la pureza sexual antes del matrimonio puede parecer poco realista, pero los hechos confirman que esa decisión, sin lugar a dudas, te conviene. Deberías considerar tu sexualidad como un don de Dios marcado con el siguiente aviso:
 
“Para el máximo disfrute, no abrir antes de la boda”.